Ahora que se va acercando el nuevo año, hemos querido pararnos a recopilar algunos puntos esenciales que te van a servir de guía para que en el próximo 2022 puedas contar con las directrices esenciales en cuanto al mantenimiento de edificios se refiere. No importa si hablamos de un inmueble de oficinas, viviendas, centro comercial… Estos consejos se pueden aplicar a nivel general, en cualquier caso y sin importar la tipología específica del edificio.
Qué tener en cuenta a la hora de un correcto mantenimiento de edificios en 2022
Aunque son muchos los aspectos a los que debemos prestar atención para garantizar el óptimo estado de un edificio, nos vamos a centrar en puntos básicos que aseguren el correcto bienestar del inmueble. De esta forma, esta es nuestra checklist de indispensables a revisar:
- Comprueba si existen problemas como humedades, grietas, rupturas, etc. Además de ser una cuestión de estética, esto puede acarrear serias consecuencias para la seguridad de las personas.
- Tanto a nivel de fachada como en el interior del edificio, es importante comprobar si la pintura presenta problemas provocados por el propio uso del inmueble, a consecuencia del paso del tiempo, condiciones climatológicas adversas, etc.
- Verificar estado de las instalaciones eléctricas y tuberías.
- Comprobar cristales, especialmente de puertas comunes y posibles ventanales del edificio.
- Cerraduras, portones y entradas al edificio. Indispensable, además, para garantizar la máxima seguridad en el interior de los mismos.
- Iluminación y ventilación, con especial atención si existen instalaciones de circulación de gas.
- Zonas comunes. Relevante especialmente este apartado, en los casos de comunidades de vecinos.
- Sistemas antiincendios y elementos de seguridad requeridos en caso de que pueda producirse una situación de este tipo.
- Telefonía y cableado. También debes comprobar que los sistemas siguen cumpliendo con la normativa y que, además, garantiza la distribución en todo el edifico.
- En el mantenimiento de edificios, también es fundamental revisar el estado de elementos como zapatas, muros de contención o posibles pilares de carga.
Trabajos reactivos vs trabajos preventivos
En este punto del contenido, tenemos que pararnos a diferenciar entre los que son considerados trabajos de mantenimiento reactivos, frente a los preventivos. Normalmente, solemos hablar de trabajos de mantenimiento reactivos. Es decir, los que se realizan de manera exclusiva cuando se identifica algún tipo de problema o deficiencia en el edificio. Habitualmente, conllevan un gastro extraordinario para los propietarios y, además, suponen molestias en la espera de solución del problema.
Por eso, aquí va un consejo esencial: apostar por el mantenimiento preventivo. ¿Qué quiere decir esto? Estas tareas de mantenimiento de edificios se realizan con el objetivo de evitar que se produzcan problemas a futuro y deben ejecutarse de manera periódica (según el requerimiento concreto). El mantenimiento preventivo nos ayudará a una correcta conservación del edificio y al significativo ahorro de costes en problemas mayores que puedan aparecer.
¿Cuándo se debe realizar la revisión de un edificio?
Para responder a esta pregunta, tenemos que considerar principalmente un factor: la edad del inmueble. Cuanto más antiguo sea, más posibilidades de estar expuesto a la aparición de posibles problemas.
Por eso, son recomendables las inspecciones desde el mismo momento de su construcción, y especialmente, a partir de los 30 años, momento en el que se aconseja realizar una revisión cada 10 años.
Pero si el inmueble tiene más de 50 años, la inspección es obligatoria y su objetivo es garantizar la seguridad. Aquí entran en juego la Inspección Técnica de Edificios y el Libro del Edificio, dos documentos obligatorios en algunas Comunidades Autónomas.
Trabajos verticales para mantenimiento de edificios
En todo este entramado de tareas necesarias para la gestión global del mantenimiento de edificios, los trabajos verticales juegan un papel fundamental para su correcta realización y posibilitan que muchas de las acciones necesarias de mantenimiento, puedan realizarse con total garantía.
Algunos ejemplos en los que son fundamentales los trabajos en altura:
- Limpieza de fachadas.
- Impermeabilización.
- Pintura y saneamiento.
- Restauración.
- Albañilería.
- Fontanería.
Y recuerda, es esencial que todas estas acciones sean realizadas por profesionales expertos en trabajos verticales. Conoce cómo Técnika pueda ayudarte en el mantenimiento de edificios, solicitando más información en nuestra sección de contacto.